Mamoplastia de Aumento
Volumen armónico, proporción corporal y feminidad restaurada
La mamoplastia de aumento es un procedimiento quirúrgico que busca mejorar el volumen, la forma y la proyección de los senos mediante la colocación de implantes mamarios.
Conoce más sobre Mamoplastia de Aumento
Está indicada en pacientes que desean realzar su figura de forma equilibrada, ya sea por razones estéticas, reconstrucción post-explantación o pérdida de volumen tras embarazo, lactancia o pérdida de peso.
En la práctica del Dr. Fabián Cuevas, este procedimiento se aborda con máxima precisión y planificación, asegurando que el resultado se vea natural, armónico y en sintonía con la estructura corporal de cada paciente.
Beneficios para el Paciente
Este procedimiento mejora la proporción del torso, proyecta el busto y restaura la confianza personal. Permite redefinir el escote y corregir asimetrías preexistentes. Cuando se realiza con criterio médico-estético, la mamoplastia de aumento realza la silueta sin exageraciones, respetando la anatomía y deseos reales de la paciente.
Tu Consulta con el Dr. Cuevas
Durante la consulta, el Dr. Cuevas analiza detalladamente la anatomía torácica, el tipo de tejido mamario, la calidad de la piel, y las expectativas de la paciente. Se discute la elección del tipo de implante (anatómico o redondo), su volumen, proyección y textura, así como la vía de abordaje (axilar, inframamaria o areolar) y el plano de colocación. Todo el proceso se diseña a medida, con enfoque en seguridad, proporción y durabilidad.
El Procedimiento
La cirugía se realiza bajo anestesia general y tiene una duración promedio de 1 a 2 horas. El implante se coloca cuidadosamente según el plan preestablecido, con técnicas que minimizan el trauma tisular y favorecen una recuperación más rápida. El procedimiento puede realizarse como cirugía primaria o como parte de una cirugía combinada con pexia u otros tratamientos estéticos del tronco superior.
Recuperación y Resultados
Tras la intervención, es habitual presentar sensación de tensión, inflamación y sensibilidad moderada, especialmente durante los primeros días. La paciente puede retomar actividades cotidianas livianas a partir del quinto día, con reincorporación progresiva al ejercicio físico después de las 4 a 6 semanas. El resultado final es visible a partir del segundo mes, una vez se desinflama el tejido y el implante se adapta a la nueva forma del seno.
El aumento mamario no se trata solo de volumen, sino de armonía corporal y confianza personal cuidadosamente restaurada.
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